Cuando se trata de proteger los bienes de un local comercial, no hay mejor opción que la alarma antirrobo, un dispositivo único, versátil y que complementa perfectamente un sistema de seguridad, no sólo como elemento capaz de disuadir al ladrón, sino a modo de llamado a la acción de las fuerzas del orden. Usar apropiadamente este aparato es fundamental para optimizar la respuesta a los inconvenientes que afectan su patrimonio y la integridad de los clientes.
Por ese motivo, y comprometidos con la seguridad de su establecimiento, el día de hoy le brindaremos una serie de consejos con los cuales se busca aumentar la eficiencia de los sistemas antirrobo para tiendas, de forma que no baste con incluir los mejores, sino que lo optimice con el fin de brindar los resultados más profesionales, con ninguna falsa alarma y promoviendo, ante todo, la integridad del patrimonio, su bienestar y la mercancía.
Probarlos
Tener un sistema de sensores antirrobo ya hace que los ladrones se lo piensen dos veces antes de intentar un asalto a su tienda, pero si en algún momento detecta que tiene fallas o no funciona apropiadamente, van a aprovechar la oportunidad y saquearon su negocio; por eso es imprescindible que se asegure periódicamente que sigue funcionando.
Para eso, realice inspecciones visuales en las que verifique si las unidades no tienen golpes o indicadores de algún problema físico que esté alterando la calidad de los sensores o su capacidad de respuesta; además, si desea descartar un error interno, habrá que realizar un pequeño simulacro en compañía de sus empleados, de forma que logre identificar si actúa como debería o si tiene un fallo que deba ser corregido de inmediato.
En caso de que detecte un problema le recomendamos que lo guarde en secreto para usted o sólo lo comparta con personas de extrema confianza; no significa que estemos promoviendo la falta de comunicación entre los empleados en una situación de emergencia, sino que es claro que gran parte de los asaltos de los últimos años se han presentado gracias a infiltrados que proporcionaron la información necesaria a los maleantes.
Rectifique las contraseñas y cámbialas periódicamente
Todo sistema de alarma antirrobo posee una contraseña de armado y desarmado, con fines de seguridad, esta clave debe ser confidencial, en lo posible que sólo la conozca una persona, no anotar en ningún lado y al digitarla asegurarse de que no existen terceros que puedan conocer el código. Si en algún momento se llega a revelar pondrá en peligro la integridad de la empresa ya que se podrá desactivar legalmente y no dejar rastro de forcejeo que ayude a dar con los responsables.
Por eso, recomendamos comprobar la integridad del código regularmente, es decir, ingresarlo para verificar que aún se lo sabe y que la alarma continúa aceptando la contraseña como válida. Además, una práctica de seguridad saludable es cambiar la clave periódicamente, por lo menos una vez al mes, en este caso, asegúrese de usar patrones nuevos, que no correspondan a dígitos anteriores o que emplee en otros dispositivos; utilice secuencias poco comunes y que no sean deducibles, por ejemplo, fechas importantes o números de identificación.
Al cerrar el negocio cerrar todas las puertas y ventanas
Parece un consejo lógico, dejar una ventana abierta es darles una vía libre a los malhechores, pero en realidad no es tan obvio como aparenta; la mayoría de los casos de hurto se dan por descuidos de los propietarios al momento de cerrar el establecimiento; esto le puede suceder en cualquier instante, bien sea que esté distraído, vaya de afán, ocurra una eventualidad que capte su atención o haya dejado esta labor en manos de un inexperto. Por eso, cuando deba culminar el día esté muy atento a su entorno.
No realice cambios sin el acompañamiento de un experto
El equilibrio entre los sensores, las antenas y las alarmas es muy delicado; cualquier pequeña alteración tendría repercusiones terribles en el sistema, ocasionando menos precisión e incluso fallas que dejan inutilizable la alarma antirrobo; por eso, es importante que si va a cambiar algún sensor o alterar una configuración, se la comunique inmediatamente a nuestros especialistas, quienes le aconsejarán si es o no necesario y desarrollarán el procedimiento de manera ideal para impedir errores.
No emplee la alarma para cualquier eventualidad
Muchas veces se utiliza la alarma no sólo para alertar de un robo, sino que se emplea con el fin de avisarle a los clientes que están a punto de cerrar, o a los empleados a que desarrollen un protocolo en específico como un simulacro o salir a su período de almuerzo; esto está mal, porque en el momento en que ocurra una emergencia de verdad nadie sabrá cómo actuar, se dará paso a la confusión y será más probable que los ladrones se salgan con la suya.
Mantener la alarma antirrobo es una prioridad para todos; por ese motivo, los invitamos a tener un equipo en perfectas condiciones y consultar cualquier duda acerca del funcionamiento de este sistema llamando a Taltix a los números (55) 5592 6774, (55) 5533 4822 y (55) 5546 1904 o escribanos al correo hola@taltix.com, donde nuestros asesores estarán dispuestos a ayudarlo en todo lo que requiera.
