Las alarmas para ropa son un sistema de seguridad que se coloca con sensores dentro de la mercancía o prendas de vestir para detectar si alguien intenta sacarlas de la tienda sin haberlas pagado. Durante los últimos años, ha aumentado la cantidad de robos que se planifican con la intención de obtener un beneficio económico con la venta de los productos que delinquen.
Estos robos son conocidos en los medios de comunicación como los «robos hormiga» que son grupos de personas que se organizan para asistir a las tiendas y ocultar mercancía bajo su ropa, dentro de sus bolsas o carriolas, o entre la ropa de su bebé para poder salir de la tienda sin pagar nada. Muchos negocios buscan técnicas o maniobras de seguridad para evitar que las personas puedan estafarlos.
Aunque algunos han logrado con éxito erradicar a esas personas de su negocio, hay otras que no tuvieron el mismo éxito puesto que las medidas de seguridad por las que optaron no fueron las más eficientes. Por esta razón, este artículo analiza algunas de las formas más efectivas para evitar los robos hormiga y erradicarlos de su tienda.
Evitar espacios pequeños
Dentro del acomodo de la mercancía en el local o tienda, es importante que se evite dejar espacios pequeños en los que sea fácil para una persona agacharse y esconder la mercancía. Si hay algún punto en la tienda en el que una persona pueda disimular es cuando el acomodo de la tienda no es eficiente. La dependiente de la tienda debe poder ver todo desde el ángulo de la caja para que nadie intente hurtar algo.
Contar con broches de seguridad para ropa permiten que al momento en que la persona quiera salir con el producto sin pagarlo los arcos de seguridad sonarán. Así puede alertar a los guardias de la plaza o a los policías que se encuentren a la redonda, según sea el caso.
Contar con personal suficiente
Aunado a lo anterior, si se trata de un negocio más grande, en el que existen varias divisiones y una persona no tiene acceso visual a todos, lo más recomendable es contar con mucho personal. Así se puede colocar a los vendedores en puntos estratégicos desde los cuales todos puedan vigilar a los clientes y al mismo tiempo poder atender a otros.
Los ladrones hormiga aprovechan en los locales donde solo hay una o dos personas atendiendo el negocio porque es más fácil causar una distracción. Por eso, aunque se trate de un negocio pequeño, es necesario contar con mínimo dos o tres ayudantes. A menos que el negocio sea muy pequeño y lo atienda el dueño directamente.
Tener equipo de seguridad
En este punto se requieren a dos tipos de equipos de seguridad diferentes. En el primero hablamos de las herramientas tecnológicas que nos permiten colocar cámaras de vigilancia a lo lago del negocio, alarmas contra robos y sensores para ropa. Así se puede tener una vista amplia del lugar y mantener el orden de las instalaciones.
Si se trata de un local aún más grande, el otro equipo de seguridad es el elemento humano, que pueden ser dos o tres guardias. La ventaja de contar con guardias a parte de los vendedores es que los primeros, solo se dedican a vigilar el negocio, revisar continuamente las cámaras de seguridad y detener a alguien si trata de huir con mercancía. Así el negocio puede encontrarse más seguro al igual que los empleados que no se ven afectados con el robo.
Cuando los negocios no son tan grandes, pueden usarse los sensores que tienen los productos como una forma de reconocer si alguna persona intenta llevarse la mercancía.
Sistema de revisión del cliente
Algunas tiendas cuentan con un sistema de revisión para los clientes que empieza con la paquetería en el momento que llegan a la tienda, para que dejen sus bolsas, así no las carguen dentro de la tienda. También cuentan con un sistema que permite al vendedor quedarse con el producto hasta que tenga el ticket de pago del cliente.
Este sistema está organizado con la sección de compra hasta el fondo de la tienda y en los pasillos están las cajas donde las personas pueden pasar a pagar. Por último, en la entrada se encuentra la zona de paquetería y entrega, donde el cliente muestra su comprobante de pago y las dependientes entregan el producto en donde retiran las alarmas para ropa una vez que el cliente está por retirarse.
Prohibir la entrada de carriolas
Para muchas mujeres el sistema en que operan los robos hormigas es utilizando a sus hijos mientras lo cargan en brazo y esconder cosas dentro de la carriola, lo más recomendable es que no se permita la entrada del aparato. No solo porque representa una oportunidad para esconder cosas, sino porque son armatostes muy grandes y estorbosos que limitan la movilidad de las personas y más cuando los locales son pequeños.
El problema de la inseguridad y los robos hormiga en el país crece todos los días y cada vez se complica más que pueda erradicarse. Es por esta razón que las personas que trabajan honradamente deben ver por su seguridad y la de sus trabajadores. Tomar precauciones previas a que suceda un altercado disminuye las probabilidades de tener que enfrentarse a una situación como esa.
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